Hazme poesía, con tu sonrisa, con tu mirada clara que traspasa el alma.
Hazme poesía en cada suspiro rebosante de tu corazón.
Poesía con tus abrazos dulces, con tus susurros al oído. Entrelazando tus dedos a los míos para componer canciones sordas.
Poesía en tus andares sinuosos cuando te giras a buscarme y me encuentras allí, de pie, acogotado por el miedo a tenerte y perderte.
Hazme poesía con tus te quiero lanzados al viento de un día cualquiera, en una hora cualquiera.
Poesía convertida en vida, eso haces cada día.