Hay que ver como cambian las cosas. Llevo años riéndome con una broma tonta cada vez que voy a Jerez por Navidad. Siempre la misma: “uno de los tres reyes magos es de aquí”, comento muy serio, “o eso decía Esteban Rallón” Y ahora llega Benedicto XVI y nos dice que Baltasar era de la Caleta, y que no era negro, que estaba moreno por el sol. Y que Melchor y Gaspar tenían de orientales lo que un jerecista de cadista, el blanco de los ojos. Que nada de Oriente, que eran de Occidente, del occidente más occidental. De Tarsis, Tartesso, las tierras reinadas por Gerión y Argantonio.
Y eso me lleva a pensar que estos tres eran unos farsantes, que de magos nada (en Cádiz no hay mas mago que el Mago), de reyes menos. Seguramente estarían tirados en la Caleta hablando del poco trabajo que había en Cádiz desde que terminaron el acueducto y se dijeron «po vamo a tener que irnos» y se pusieron en camino para Cartagonova, que Castellón no existía. Y una posta llevó a la otra, y cuando se dieron cuenta habían cambiado sus camellos habituales por otros con joroba y andaban por Belén Vieron las colas a la entrada del portal y se pusieron detrás, que como todo buen gaditano sabe: si hay cola es que regalan algo.