Pero he aquí que me llamó un amigo, y me hizo una proposición dificil de rechazar: ver American Pie. Y uno, que había visto todas las películas de American Pie (las 3 originales) en el cine, no podía renunciar a ver el reencuentro de estos cinco chalados precuersores del cine gamberro que luego saltó de nivel con «Resacón en las Vegas» Y lo cierto es que me reí, a carcajadas, con las payasadas de los viejos compañeros de clase, aunque salí de la película sientiendome viejo: ellos volvían 13 años después a una cena de viejos alumnos. Nosotros hace ya 16 años que salimos del colegio: lo dicho, nos hacemos viejos.
¿Exceso de cine?
Me gusta el cine, mucho. Excesivamente, incluso. Pero ayer batí mi propio record: ver dos películas diferentes, en dos salas diferentes, de dos cines diferentes y en dos ciudades diferentes, con una hora de diferencia.
Había quedado el pasado fin de semana en llevar a mis sobrinos al cine, pero por esos designios del destino, al final acabé viendo «Los Vengadores» con amigos. Gran película, divertida y entretenida, sobre todo cuando la vis cómica de Robert D. Jr. convertía a Ironman en el centro de la escena.