La Bella Escondida es uno de esos enclaves que podría cargarse de misterio y leyendas. Una torre mirador escondida de la mirada de curiosos bien pudo haber sido la barroca cárcel de alguna hermosa joven, encerrada por un padre celoso del hombre que la amase. Pero, a veces, la realidad es tan profundamente distinta que se hace hermosa por verdad.Y la realidad es que la torre, levantada en el s. XVIII, nace del amor de un padre hacia su hija. Una hija que había entrado en clausura en un convento cercano, y para quién iba dirigida la torre. Más allá de otear horizontes cargados de vela, la torre era un signo de la firmeza y voluntad de la joven novicia. Cuenta la historia que el padre ordenó levantar una torro hermosa y robusta, que recordase a su hija la fortaleza necesaria para mantener los votos a los que se comprometía: castidad, pobre, obediencia. Pero, sobre todo, para que recordase el amor de su padre.
Y para que la torre se viese desde el claustro del vecino convento, mandó construirla en un extremo de la azotea, invisible para el mundo terrenal y visible sólo desde el cielo. Elevándose orgullosa en su belleza sobre Cádiz.
BONITA HISTORIA.. UN BESO..
Me gustaMe gusta
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Me gustaMe gusta
HolaSoy una periodista dominicana que reside en Sevilla, adoro Andalucía, escribo en el DIARIO Bahía de Cádiz y eso me ha obligado a investigar sobre esta ciudad y sus pueblos, no se como me llegó el nombre de la Bella Escondida y en seguida inicié mi búsqueda, así encontré tu blog, por supuesto que hablaré de la Bella Escondida, seguiré indagando a ver si descubro algún otro misterio, me encanta desentrañar viejos secretos.Felicidades por el blog y por ser gaditano, es una ciudad que tiene toda la historia de los siglos que la invisten.Un cordial saludo.
Me gustaMe gusta
Con mucho retraso, pero hola Miuris, gracias por lo del blog y espero que descubras esos otros muchos encantos de esta ciudad.
Me gustaMe gusta