En el nombre del padre

En el nombre del padre, del hijo ¡Y de la madre que te parió! Estamos aquí reunidos ¡Para matarlos, nos os dejéis engañar. Vamos a matarlos. Sin piedad! Señor ten piedad ¡Vamos a acabar con la vieja, esa morirá la primera! Por mi culpa…. ¡Y después vamos por el jefe! Por mi culpa… ¡Y finalmenteSigue leyendo «En el nombre del padre»

Los fantasmas no existen

La puerta se abrió, sí, pero no por nuestras ganas de huir de los fantasmas. La realidad era más común, menos exotérica: el padre de Damian había acudido en nuestro auxilio al escuchar los gritos: -Juanito, te has pasado. Estos críos van estar sin dormir días. Y Juanito, que como se habrán imaginado era elSigue leyendo «Los fantasmas no existen»