El demonio continuaba volando sobre la ciudad, observando cada rincón de la misma. Intentando descubrir donde su ataque haría más daño. En ocasiones descendía unos metros, para volver a subir nuevamente. Finalmente pareció detenerse en el aire, observando las murallas interiores de la vieja mansión Ankber. Su grito desgarró el cielo, mientras se abalanzaba sobreSigue leyendo «El que todo lo ve»
Archivo del autor: Javi Fornell
¡Caracoles!
Lo reconozco. No me gustan los caracoles. Son bichos viscosos, babosos, se arrastran por el suelo y llevan a gala eso de sacar los cuernos al sol. Y, la verdad, no entiendo que alguien pueda comérselos. Aunque he de reconocerles que hace un tiempo cometí el error de probar una pequeña tapa de los bichosSigue leyendo «¡Caracoles!»
En pocas palabras
«Te lo juro, killa, mirabas para arriba y era como andar por la Avenida» Recién llegada de Nueva York, en la línea 2 de Cádiz.
La primera vez
Nieves era una de las niñas más guapas de la urbanización. Y por alguna extraña razón estaba en nuestro grupo. Como supondrán nosotros estábamos como locos. Y no sólo porque las hormonas revolucionaran nuestros cuerpos quinceañeros. Aquel día estábamos en las pistas deportivas, jugando al fútbol, cuando la vimos venir. Venía corriendo por el caminoSigue leyendo «La primera vez»
¿Felicidad?
El pasado viernes les hablaba de la soledad. Y lo hacía gráficamente. En primera persona. Como si yo mismo sufriera ese mal. Nada más lejos de la realidad. Desgraciadamente, ni mis amigos ni mi familia me permiten gozar de más soledad que la estrictamente necesaria. Cuando escribo esto no sé que reacciones habrá provocado miSigue leyendo «¿Felicidad?»
Omnipresencia
Definitivo. Soy dios. Sí, ya se que algunos no lo creerán. Pero lo soy. Aunque este mundo de agnósticos y ateos quiera negar la existencia de seres supremos, es definitivo que existimos. Yo existo. Y, como les digo, soy dios. Comprobado. Porque sólo siendo un dios tendría el poder de la omnipresencia. Que es comoSigue leyendo «Omnipresencia»
Alas negras
Robbel estaba en la muralla cuando se desató el primer ataque. Los bárbaros intentaban trepar por escaleras que raudamente los soldados tiraban al suelo. El caos reinó entre los hombre. Hasta que una figura demoníaca cruzo el cielo. Robbel levantó el rostro hacia ella. Si bajaba empezaría la lucha de verdad. Junto a él vioSigue leyendo «Alas negras»
Soledad
Soledad. No hay otra palabra que defina mi existencia. Sin sentido, sin sentimiento, sin más sueños que los rotos. Con el corazón hecho pedazos bajo una máscara de alegría perpetúa. Mentiras escondidas en sentimientos ajenos. Soledad. Esa es la palabra que define mi vida: pura y puta soledad. He intentando buscar una explicación a porquéSigue leyendo «Soledad»
Al tonto lector y no al sabio
Escribía Erasmo de Rotterdam que «la sabiduría inoportuna es una locura, del mismo modo que es imprudente la prudencia mal entendida». En el “Elogio de la Locura”, Erasmo le daba voz a la sin razón, convirtiendo su obra en una sátira moral donde se permitía atacar todo lo que consideraba incorrecto, argumentando que la locuraSigue leyendo «Al tonto lector y no al sabio»
Moraleja
La luna caía lentamente mientras el manto estrellado de la noche comenzaba a difuminarse con los primeros rayos del sol. Lucrecia esperaba en la puerta del caseron. Una vieja mansión de altas torres en las que la hiedra se enredaba huyendo del frío suelo hacia el cielo. Los tres hombres habían llegado caminando. Tranquilos peseSigue leyendo «Moraleja»