No tenía grandes expectativas con esta película, más que pasar un buen rato con una película de acción que tenía entre sus protagonistas a Jason Bateman (Ozark, Juno), uno de mis actores preferidos. La premisa también me recordada cintas clásicas navideñas como La Jungla de Cristal (1988), pero el resultado no fue para nada el esperado. Ni la acción ni la intriga han estado a la altura de una cinta que se presumía por Netflix como uno de los grandes estrenos de la temporada navideña (con Red One, bastante más divertida pero menos «adulta»).
Equipaje de mano se hace, sin embargo, poco creíble, con un terrorista (Jason Bateman) recorriendo el aeropuerto entre los pasajeros sin ningún tipo de control; mientras el protagonista Taron Egerton (Saga Kingsman) parecía ir dando trompicones mientras trataba a de salvar a su pareja. Demasiado previsible desde el inicio, carece de los elementos básicos del género, convirtiéndose en aburrido circuito por el aeropuerto; en el que los personajes se van cruzando y desapareciendo de forma brusca, mediante asesinatos realmente insostenibles.
Para colmo, la pareja protagonista carece de carisma alguno y si a eso se le une que Taron Egerton parece carecer de expresividad (puede estar corriendo con un tiro en la espalda, abrazando a su pareja o saltando de un avión, que siempre estará impasible), hace que esta película se convierta en una verdadera perdida de tiempo para el espectador.
Javi Fornell 