Those sweet songs

Hoy permitanme recomendarle uno de esos pequeños placeres que la vida nos permite revivir. Acercarte a una tienda de discos y decir un simple «¿disco?, quiero la edición en vinilo» y ver la cara del dependiente de marras preguntándose si realmente estás en tus cabales. Pero sobre todo, llegar a tu casa, abrir el disco, y sentirte como tu padre cuando colocaba los suyos en un viejo tocadiscos.

Y es que, vuelve el vinilo, tal vez porque las discográficas piensen que no se puede copiar tan fácilmente -aunque por menos de 100€ tienes un plato que te permite pasarlo a mp3- o, tal vez, porque sepan que el amante de la buena música no hará ascos a la posibilidad de volver a disfrutar de sus discos.

Yo, por mi parte, escribo hoy un cuento romántico -con dedicatoria y petición expresa- entre una cortesana y un gran señor en la corte castellana del s. XVI, mientras disfruto del «Those sweet words» de Norah Jones.

Publicado por Javi Fornell

Historiador y novelista. Amante de las letras y de los libros. Guía turístico en la provincia de Cádiz y editor en Kaizen Editores

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